Emisora

jueves, 16 de mayo de 2013

Rafael Leónidas Trujillo Molina 16 de mayo del 1930


  Rafael Leónidas Trujillo Molina

El régimen de 31 años de Rafael Leónidas Trujillo Molina nació sustentado en la represión y la intolerancia. Fue electo presidente de la República el 16 de mayo de 1930, con la única participación de la “Confederación de Partidos”, el nombre con que fue bautizada la coalición de entidades políticas que el 16 de abril de 1930, decidió apoyar el binomio Trujillo-Rafael Estrella Ureña.

Muerte de Trujillo

El 30 de mayo de 1961, un grupo de civiles y militares, incluidos antiguos colaboradores, lo mataron en la carretera que conduce a San Cristóbal, hoy autopista 30 de Mayo. Muchos dominicanos se enteraron del acontecimiento la misma noche del 30 de mayo, pero la mayoría del país conoció la información cuando habló a la Nación el presidente interino Joaquín Balaguer.

En el ataque que terminó con la vida de Trujillo, participaron Antonio de la Maza, Juan Tomás Díaz, Antonio Imbert Barrera, Modesto Díaz, Pedro Livio Cedeño, Salvador Estrella Sahdalá, Roberto Pastoriza, Huáscar Tejeda, y el teniente Amado García, adscrito a la Guardia Presidencial.

También formaron parte de la trama Luis Amiama Tió y Luis Manuel -Tunti- Cáceres, pero la noche del ataque no participaron porque cumplían otras actividades. Trujillo murió en el lugar donde hoy está el Monumento a los Héroes del 30 de Mayo.

Los conjurados levantaron el cadáver y lo llevaron a la residencia del general Juan Tomás Díaz, en la calle César Nicolás Penson, en el sector capitalino Gazcue. Alli hallaron el cuerpo agentes del Servicio de Inteligencia Militar (SIM).

Zacarías de la Cruz, chofer de Trujillo, sobrevivió a pesar de que sufrió heridas de bala.

Del grupo que mató al dictador sufrieron heridas Pedro Livio Cedeño, Amado García Guerrero y Antonio Imbert Barrera. El único que requirió asistencia especializada fue Pedro Livio Cedeño.

Imbert Barrera y Amiama Tió lograron permanecer ocultos hasta que terminó la persecución. El resto de sus compañeros fue muerto por agentes de la dictadura y el hijo del dictador Ramfis Trujillo.

El asesinato del dictador ocurrió cuando el régimen afrontaba una grave crisis como consecuencia de las sanciones económicas impuestas por la Organización de Estados Americanos (OEA) en el año 1960. En el país la oposición crecía por los ataques que Trujillo había lanzado durante los últimos meses contra la Iglesia Católica, luego que no aceptó otorgarle el título de “Benefactor de la Iglesia”, que el dictador deseaba agregar a sus títulos de “Generalísimo”, “Benefactor de la Patria” y “Padre de la Patria Nueva”.

Documentos del dobierno de Estados Unidos, publicados por el periodista Víctor Grimaldi, en su obra “La Muerte del Jefe”, confirman que la Agencia Central de Inteligencia (CIA), sabía de los planes contra Trujillo.

Los documentos precisan que el gobierno estadounidense deseaba el fin de Trujillo porque temía que surgiera aquí un régimen similar al que comenzó en 1959 con el triunfo de la Revolución Cubana, encabezada por Fidel Castro.